A inicios de noviembre durante uno de los foros de la Cumbre del Cambio Climático organizado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, dio a conocer la creación de un impuesto verde el cual irá dirigido a todas aquellas empresas que contaminan el estado de Nuevo León con la intención de que dichas empresas reduzcan sus niveles de contaminación y con ello poder remediar los daños causados al medio ambiente.
"Sin afectar al ciudadano, vamos a ir por esos impuestos que van a estar directamente etiquetados a reforestación, a transporte público y a remediar el daño que por décadas le hemos hecho a la naturaleza de Nuevo León” agregó el gobernador.
La industria de extracción de caliza se encuentra dentro de la lista de industrias a las cuáles se les aplicará el impuesto verde a partir del 1ro de enero de 2022, por el momento la cuota estipulada para las pedreras es el equivalente a 1.5 UMAs,
y ese monto irá destinado a reforestar los
daños medioambientales.
Por otro lado, en caso de que se excediera dicha norma ambiental se les aplicará de sanción 2.79 cuotas por tonelada de partículas contaminantes emitidas; aproximadamente $250 según sea el caso.
Este impuesto impactará directamente en el precio de materiales de construcción derivados de la industria caliza y empresas pedreras tales como cemento y cal dentro del estado de Nuevo León que incluye municipios importantes en esta industria como los son Monterrey y Santa Catarina.
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